Dolores Cacuango o ‘Mama Dulu’. Con ese apelativo se la conoció en los círculos de lucha por los derechos humanos. En las décadas de 1950 y 1960 se constituyó en una de las principales lideresas del movimiento indígena y feminista ecuatoriana.
Aunque pocos creyeron que podía triunfar con sus ideales, la mujer -quien falleció en 1971- terminó amasando una imagen enorme e inspiradora. De allí que, a partir de 2020, la Universidad UTE acuñó ese nombre para su mención honorífica que se creó en el 2018 y que se entrega por el Día Internacional de la Mujer.
Durante la quinta edición, celebrada este jueves, 7 de marzo de 2024, en el Teatro UTE de la Sede Matriz, se entregaron 23 nominaciones a 36 mujeres destacadas que han demostrado méritos en sus áreas de conocimiento a favor del país y de nuestra casa de estudios.
Promoción de la igualdad
En la ceremonia primero tomó la palabra Ana Changuín, secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), quien admitió que este reconocimiento “se trata de un evento magnífico y maravilloso para conmemorar el Día Internacional de la Mujer”.
Subrayó que “reconocer logros de mujeres es un ejercicio que nos permite sincerarnos como sociedad y romper patrones de invisibilización que tienden a imponerse en nuestro medio, por eso esa práctica de reunirnos todos acá (Teatro UTE) y reconocernos juntas, fuertes, valientes, productivas, es generar energía, sinergias y motiva a seguir avanzando”.
También destacó que la UTE, dentro del sistema, ofrece una beca focalizada para mujeres denominada Beca STEM y eso quiere decir que “más niñas van a poder soñar con desarrollarse y profesionalizarse en las ciencias duras que, por décadas y ahora en la actualidad, pueden ser vistas como carreras masculinas”.
Entrega de la Mención Honorífica
Las mujeres notables estaban alrededor de ocho mesas que se habían instalado en el Teatro UTE y, cuando escuchaban sus nombres, salían hasta el escenario para recibir su diploma y su litografía de Dolores Cacuango, cuyo rostro fue tomado del mural del maestro Oswaldo Guayasamín que se exhibe en la Asamblea Nacional.
Y así comenzó la entrega de los reconocimientos de manos de nuestro rector, Ricardo Hidalgo Ottolenghi. En primer lugar, subió al escenario Lorena Ankuash, miembro de la comunidad Shuar de Napints; luego la periodista Thalía Flores; Janeth Bonilla, líder Kichwa del pueblo Cotacachi; Dolores Padilla, de la Red de Mujeres en Comunicación.
En un segundo grupo aparecieron Raquel Serur, embajadora de México; Segundina Flores, embajadora de Bolivia; Tatiana Sprinchan, economista destacada por su labor comunitaria; Gabriela Sommerfeld, empresaria y ministra de Relaciones Exteriores.
Una bandera de lucha
Una vez con su diploma y litografía en las manos, la canciller Sommerfeld agradeció a la Universidad UTE y a sus autoridades por “este increíble honor, en vísperas de una fecha de gran significado para las mujeres. Tengan la seguridad que seguiré utilizando mi voz y mi trabajo para abogar por una mayor integración internacional y, sobre todo, para darle mejores días a nuestro país”.
En su discurso también dijo que “cuando las mujeres tienen la oportunidad de liderar, podemos lograr avances significativos en cualquier ámbito, debemos enfocar y aprovechar el poder colectivo de las mujeres para generar un cambio positivo en nuestras comunidades y en el mundo en general”.
Recordó que Dolores Cacuango fue una mujer ejemplo de persistencia y convicción, que movió su accionar en favor de los derechos de los indígenas y la prevalencia de sus costumbres y esencia por medio de la educación en su lengua; también pronunció la frase bandera de la lideresa indígena: “Somos como la paja del páramo que se arranca y vuelve a crecer”.
Y concluyó con otra verdad: “A lo largo de mi vida he visto que la mejor forma de contribuir a que más mujeres se sumen a la vida pública es justamente lo que en su momento hizo `Mama Dulu`, como se conocía a Dolores Cacuango: ir contra corriente, no desfallecer y buscar una causa que inspire”.
Otras premiadas
Al no encontrarse en el país, tres mujeres reconocidas se conectaron virtualmente y agradecieron la mención: Diana Icaza, de la Junta Nacional de Artesanos del Ecuador; Petita Albarracín, activista por la Erradicación de la Violencia contra la Mujer; y Flavia Freidenberg, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Posteriormente, en el salón del Teatro UTE fueron premiadas otras homenajeadas por sus méritos en el área de desempeño a favor del país y también aquellas que se destacaron dentro de nuestra casa de estudios, como estudiantes, docentes y administrativas.
En este grupo de homenajeadas nos enorgullece nombrar a: Leidy Ruiz, graduada de la carrera de Negocios Internacionales; Karina Domínguez, graduada de Administración de Empresas; Sonia Robles, graduada de la Maestría en Contabilidad y Finanzas en línea. Como mejores deportistas están: Magerlly Cárdenas y Angie Castillo.
En la categoría ‘Mejor desempeño administrativo’, felicitamos a Diana Herrera y a Tatiana Quintana. Ángela Barba, docente de la Facultad de Derecho, Ciencias Administrativas y Sociales, se encuentra en la categoría de ‘Científica del año’.
Y en la categoría ‘Mejores docentes’ están: Valeria Orbe (Odontología); Myreya Cisneros, (Medicina), así como Sonia Leyva (Ingeniería Ambiental) y Olga Pérez (Agroindustria).
Erradicar la violencia de género
Antes del cierre de esta ceremonia, nuestro Rector tomó la palabra para destacar que la sociedad requiere renovar y profundizar el compromiso por erradicar estos males y materializar la igualdad formal, que urgen más políticas y recursos para pasar de la letra muerta a la acción.
Y hoy, al entregar esta mención, estamos reconociendo a las mujeres que, al igual que Dolores Cacuango, están luchando por un mundo más justo e igualitario. E invitó a docentes, investigadoras, administrativas, estudiantes y trabajadoras a seguir luchando por sus derechos. Esa es tarea de todos.
Para todos los presentes a la entrega de la ‘Mención Honorífica Dolores Caguando 2024’ hubo una serenata con la participación de los tres grupos artísticos de la UTE: Estudiantina, Tuna y Coro. Así que en el Patio de la Cultura se escucharon canciones que se han convertido en un himno en las protestas feministas.
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